miércoles, 12 de octubre de 2011

Tarta de tiramisú

Un postre fácil y rico pero, como siempre, me complico la vida y al final parece que me falla algo. Hay gente que hace las recetas al pie de la letra sin problemas, pero a mí siempre me ocurre algún percance. En este caso la crema quedó demasiado líquida y tuve que añadir un poco de gelatina en polvo, sin embargo al principio el relleno parecía bastante compacto. ¡No sé qué pasa!

Aunque los bizcochos se ve que no estaban muy remojados, al comerla estaba muy cremosa, muy blandita…y muy rica, si te gusta el café, que siempre hay alguno al que no le gusta…¡Y no nombro a nadie!

INGREDIENTES:

400 gr. de nata líquida
450 de queso Mascarpone
50 gr. de licor de café gallego
200 gr. de azúcar
3 huevos
Cacao
Bizcochos de soletilla
Gelatina en polvo (opcional)
Chocolate blanco para adornar
PREPARACIÓN:

En primer lugar mezclé la nata con el queso, añadí el azúcar y seguí batiendo hasta que quedó todo bien mezclado. La crema resultante era bastante compacta. Separé las claras de las yemas y monté las claras a punto de nieve. Las yemas las uní a la crema anterior y a continuación las claras. En ese momento la crema se puso un poco líquida y le añadí una cucharadita de gelatina en polvo para arreglar el entuerto. Metí en el frigorífico un rato.

Mientras preparé un café cargado al que añadí el licor de café.

Una vez frío fui remojando los bizcochos de soletilla en el café; no mucho porque enseguida se desmorona la tarta. Coloqué en un molde redondo (en realidad no es un molde es un aro ajustable, de esta forma no hace falta moverla y no se desmorona al desmoldarla) una capa de bizcochos y los huecos que quedaban los rellené con trocitos de bizcocho. Los cubrí con la crema de queso y nata. Repetimos esta operación capa de bizcochos, capa de crema y finalizamos con una capa de crema. Alisamos bien el preparado y lo metemos en el frigorífico, mejor hasta el día siguiente.

Poco antes de servirla, quitamos el aro y ponemos bizcochos recortados alrededor de la tarta, los sujetamos con un lazo y finalmente espolvoreamos por encima el cacao con ayuda de un colador. El cacao es conveniente ponerlo poco antes de servir porque se humedece y queda mas feo.

Le hice el redondel blanco con chocolate rallado. No se me ocurrió otra cosa y sin él parecía que quedaba muy sosa la decoración.
Se puede hacer en un molde de cristal y así no hace falta desmoldarla. De esta forma, aunque quede demasiado blanda no importa.

1 comentario:

  1. Gracias por tu sugerencia!!! Hice por primera vez tiramisu y me quedo la crema chorreando. Voy a probar con la gelatina en polvo sin sabor. Me salvaste, mil gracias!!

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